miércoles, junio 26, 2013
Pez en tus mareas...
A ti, único y sagrado amor, que vives en mí por siempre.
Por más que intente huir de tu embrujo y especial ternura , la brisa marina me trae como maná de sueños tu inconfundible azul. Y quedo eclipsada en estas olas que dibujan tu aura, en el anhelo por fundirme en tu canción de sal y de gaviotas.
Sé que los bosques y los valles apaciguarían mi ser, al no hallar ningún vestigio de tu voz entre las tibias hojas. Y sé también que ese paisaje de esmeraldas sin memoria, liberaría las cadenas de un latir que no sabe fluir si no te nombra , como un rosario de amor que aviva el agua.
Pero me has hecho pez de tus mareas de amor y tu energía. Y por tu azul puedo vencer a los ocasos de la muerte. Aunque tiemblen de tristeza y vacuidad, sin que lo sepas, mis escamas- lágrimas.
Cuanta sensibilidad y melodía tienes tus letras. Leerte en esta entrada es como rozar la brisa que produce una tarde de verano a la orilla de ese azul que está en tu sentir.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho amiga.
Te dejo besos.
Respuesta al mar, anuncio para retorcerse entre las nerviaciones de una sensaciones que son marmol ductil.
ResponderEliminarNecesidad de agua en el perfecto bosque de la mirada.
Prosa unica llena de nerviaciones sincopadas. besos. carlos.
Gracias por venir a estos versos, querida Elda! Y disculpa el retraso en mi respuesta.
ResponderEliminarCreo que de no existir el mar, no existiría mi inspiración porque sólo sé escribir desde el azul...
Besos.
Gracias Carlos por estar siempre en mis escritos! Es un honor para mí el tenerte también presente en el prólogo de mi libro Ecos de un sentir.
ResponderEliminar" Necesidad de agua en el perfecto bosque de la mirada..." Preciosa imagen.
Besos.